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Eduardo Escudero
Director de Negocio de A Contracorriente Films
«A Contracorriente es una distribuidora que siempre ha apostado por participar en
todas las iniciativas de educación. Quizá sea debido a nuestra propia línea editorial,
ya que adquirimos muchos biopics, adaptaciones literarias, películas históricas… En
definitiva, obras muy idóneas para la comunidad educativa. Además, a lo largo de los
últimos años hemos construido un extenso catálogo de más de 1,500 películas, que
incluye títulos de todo tipo y varias obras maestras, por lo que era un crimen no empezar
a hacer cosas vinculadas a la educación. Estamos encantados de ser proveedores de
Filmin y también de haber firmado con Platino Educa para dos películas –incluida La
librería, cinta que tuvimos el honor de coproducir.
Desde nuestros Cines Verdi de Madrid y Barcelona ofrecemos el programa “En el cine
como en las aulas”, con una programación educativa muy ajustada de precio. También
hemos creado un servicio de vídeo bajo demanda, llamado Sala Virtual de Cine, que
se complementa muy bien con plataformas como Platino Educa o Filmin, porque hace
accesibles a colectivos como el de los educadores los títulos de estreno poco antes de
su lanzamiento general. Esta Sala nació en abril buscando la adhesión de otros cines
–que finalmente fueron 82–, pero ahora mismo la tenemos en suspenso esperando
su relanzamiento como una nueva plataforma, que esperamos que esté disponible
antes de finales de año y que albergará el proyecto de la Semana de Cine Espiritual
que nos ha encomendado la Conferencia Episcopal. Otra de las misiones de la Sala va
a ser procurar que cada comunicación pública online vaya acompañada de otra para
acudir a una sala de cine, porque creo que no solo se trata de facilitar la educación
con cine en las aulas, sino también la posibilidad de hacerlo en una pantalla de cine,
y que ambas experiencias se complementen.
En España, las autonomías suponen un reto adicional a la hora de unir cine y educación,
y por eso el apoyo de las instituciones a todas nuestras iniciativas es fundamental y tiene
que ser decidido. Más allá de la buena voluntad y los buenos medios que pongamos
todos, lo importante es acabar en un presupuesto. Mucha de esa ayuda puede venir
de Europa, a través de todos esos fondos que ahora tienen que repartirse entre los
distintos países, de ese Programa Media que ha aumentado sus presupuestos, etc…